Los recientes acontecimientos en Cuba demuestran una vez más
por qué esa Revolución equivocada en su esencia como todas las del siglo XX, ha
logrado sobrevivir más allá de lo
imaginable.
Desde sus comienzos su máximo líder Fidel Castro demostró
poseer un habilidad única que le permitió adaptarse a cada momento histórico
del mundo, incluso después de muerto.
Muchas personas creen que Fidel fue comunista desde joven y
que siempre abrazó las ideas de Marx y Lenin. Nada más incierto, Fidel nunca
militó en el partido comunista de la isla antes de la Revolución y sin embargo
terminó siendo su presidente vitalicio. Sólo con este pequeño detalle está
descrita su gran capacidad de maniobra politica.
De pensamiento liberal
supo entender una vez en el poder que el mundo se movia en otra dirección y no
le costó mucho asumir posturas más convenientes para su futuro político y el de
su isla.
A los pocos meses de ser derrocado Batista el 1er país que
visitó fue precisamente quien seria su mayor enemigo: Estados Unidos. Obviamente él solo quería salir de la
dictadura en la isla e implantar un gobierno reconocido por la Casa Blanca. No
le interesaba una confrontación con ese país. En ese momento su mente jamás podría imaginar los giros que la historia le
tenia reservados. Pero toda su ilusión se desvaneció cuando entre el grupo de
políticos que lo recibió se encontraba un personaje que tenia una gran fobia a
todo aquello que no le pareciera surgido de formas democráticas clásicas:
Richard Nixon . El rechazo hacia Fidel fue inmediato por su aspecto barbudo,
desaliñado y demasiado hablador. Nunca se preocupó por entender las verdaderas
intenciones de aquel jóven aún perdido en el mapa político del mundo. Quizás
ese el fue el 1er gran error de Estados Unidos con esa isla.
La desconfianza marcó ese primer encuentro y Fidel no le
quedó otro camino que aprovechar esa mala imagen que le prestaron en el norte y
puso sus ojos en donde eso si le traería grandes dividendos: La Unión Soviética.
A partir de ese momento la historia de Latinoamérica fue otra:
Krushev quedó cautivado con el carisma
de aquel joven caribeño y rápidamente percibió lo útil que le seria para
irradiar su ideología en esta parte del mundo . Por su parte Fidel vió
en Krushev un padre que le garantizaría un
gran respiro económico y una oportunidad
histórica para su proyección universal. El único perdedor en todo ésto
fue Estados Unidos por no saber manejar
con inteligencia aquella visita de un joven romántico que se sentía sólo y desesperadamente buscaban un apoyo
paterno.
Fidel mismo en una entrevista posterior confirmó esta
apreciación con las siguientes palabras:
“Si en algún momento para poder sobrevivir es necesario ser marxista
leninista, pues entonces seré marxista leninista”.
Elogios y alabanzas acompañaron a Fidel por muchos años y la
imagen de una revolución que se preocupaba por los pobres y se enfrentaba a una
potencia devoró la mente de todos los jóvenes rebeldes del mundo. Pero pocos se
detenían a pensar si esa revolución era realmente sustentable sin el apoyo de
la URSS.
Ese momento de dura prueba llegó cuando Gorbachov apareció
en escena en la década de los 90, cuando inició una serie de cambios que afectaron esa
“comodidad histórica que le permitia a Fidel llenar su gran ego”. Se acabaron las ayudas y
comenzó el periodo más difícil de la Revolución Cubana: “ El Periodo Especial”. No me puedo imaginar
las maldiciones de Fidel contra ese nuevo gobernante ruso, quien no dudó en
poner las cosas en su lugar: Los rusos a cuidar su economía y los cubanos que
busquen a otro padre que los adopte.
Tardaron 10 años para volver a encontrarlo. Apareció un llanero que le gustaba el beisbol, amante
de las coplas y de la academia militar y de paso con ideas medio
comunistas. Era una combinación tan
extraña que personas muy allegadas a Fidel contaban que desde la isla había
mucho recelo a hacia este llanero. No
comprendía ese fenómeno en un país demasiado tranquilo para la época.
Sin embargo luego de conocer el resultado de las elecciones
del 98, Fidel comienza a mover sus hilos
para asegurar su 2da supervivencia
económica. Con su astucia caribeña
rápidamente percibió que debajo del suelo que pisaban las alpargatas de aquel
llanero desfasado en el tiempo había algo que seria vital para él y su isla:
“Petroleo”.
Fidel abrazó a su hermano Raul sonriente:” Nos salvamos
nuevamente”. Chávez es recibido como un héroe en Cuba y de inmediato se inicia
uno de los mayores desangres financieros de un país. Miles de médicos ,
técnicos, licenciados y asesores cubanos sin certificación comprobada comienzan
a invadir a Venezuela en un desigual trueque que le garantizaba a la isla un recurso energético
que si estaba bien certificado. Los
cubanos vuelven a sonreir y el Periodo Especial es sólo un mal recuerdo
Sin embargo , no hay país por muy rico que sea que aguante
tanto derroche . Las ayudas se extendieron a otras islas del Caribe y países de
la región que vieron igualmente una oportunidad de aprovechar ese gran botin
petrolero que comenzó a repartir la Revolución Bolivariana.
Los cubanos comenzaron a preocuparse porque ellos saben muy
bien por lo que han pasado y no encontraban como decirle a Chávez que no
ayudara a tanta gente.
Finalmente la naturaleza y la economía que nunca perdonan los errores de los mortales se impusieron inexorablemente
y el llanero tuvo que dar paso a un autobusero, dejando a un país casi en ruinas.
Fidel, quien ya presagiaba todo esto, de nuevo mira a su
hermano y le dice. “ Venezuela sin Hugo y arruinada no es un padre confiable”.
Es el momento de volver al principio y olvidarse de peleas y de insultos. Obama es un buen muchacho , hay que visitar a
Estados Unidos nuevamente. A fin de cuentas no tengo prejuicios ideológicos y
Richard Nixon yo no está en la Casa Blanca.
NOTA FINAL:
Para el momento en que escribo esta las líneas,
probablemente Fidel tenga algún tiempo fuera de este mundo, lo cual
difícilmente alguien me lo podrá negar. La única prueba que tengo para afirmar
ésto es precisamente los cambios que están ocurriendo en la isla, imposibles de
concebir sin su autorización post-morten.
A mi entender antes de partir le dejó
claras instrucciones a su hermano: ”…
Pacta con Obama porque yo no puedo hacerlo , pues estoy obligado a
mantener una imagen antimperialista para no defraudar a mis seguidores. Tú en cambio estás libre de esas ataduras
y puedes salvar a Cuba. Le dejas el
nombre de Socialista por un tiempo, porque de todos modos cuando me vengas a
visitar dentro de poco, estoy seguro que se lo quitan. No creo tener fuerzas
para llegar el 1ero de Enero de 2015, cuando la Revolución Cubana cumple 57
años, pero igual dices que desde mi lecho los acompaño con todo fervor
revolucionario…”.
Finalmente pienso que si los cubanos lograron ocultar la muerte de
Chávez por tanto tiempo , no me quiero imaginar hasta donde serán capaces de
mantener “vivo” a Fidel.
Feliz año nuevo nos veremos en el 2015
El Cotejo
